50.000 vascos víctimas del hogar

La vivienda puede convertirse en un escenario muy peligroso para sus inquilinos. Quemaduras, golpes, caídas, cortes, resbalones en la ducha, intoxicaciones... Más de 50.000 vascos sufrieron el año pasado algún tipo de accidente doméstico, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Consumo. Euskadi es la segunda comunidad autónoma española donde más incidentes se registran en el interior del hogar, sólo superada por La Rioja. Las mujeres se llevan la peor parte. De hecho, las vascas sufren el 65% de los incidentes ocurridos en el entorno doméstico.

La cocina se ha revelado como la estancia de la casa más peligrosa para sus habitantes. Casi la mitad de los accidentes ocurridos en los hogares del País Vasco, comunidad en la que se registran una media de 137 percances diarios, se produce precisamente entres sus cuatro paredes, señalan las mismas fuentes. También en este caso las mujeres salen peor paradas que hombres. Ellas sufren el doble de incidentes que ellos, especialmente a la hora de preparar la comida (quemaduras, cortes, aplastamientos...). No se trata de que sean más torpes, sino que se explica porque «pasan más tiempo» en la cocina y las probabilidades de tener un percance se multiplican.

Después de la cocina, el comedor y el dormitorio son las habitaciones donde más incidentes se registran, seguidas del cuarto de baño, las escaleras interiores, el balcón o las áreas de juegos en comunidades residenciales. La limpieza y el mantenimiento de la casa es otra fuente importante de incidentes domésticos. En este apartado se incluye desde un resbalón mientras se friega a las caídas desde una escalera o un pinzamiento al intentar mover un mueble de sitio. El cuidado de los niños, las compras o la jardinería completan las lista de actividades peligrosas relacionadas con el ámbito doméstico.

Más en verano

En cualquier caso, sólo la mitad de los accidentados necesita atención médica. «La mayoría de las lesiones son sencillas de curar y no necesitan ser tratadas por un especialista», explica el jefe de Servicio de Urgencias del hospital Donostia, Pablo Busca. De hecho, los incidentes domésticos ocupan el cuarto lugar en la lista de ingresos urgentes por detrás de los accidentes de tráfico, laborales y deportivos, «si bien es cierto que durante el verano los percances deportivos y domésticos superan a las entradas por incidentes en el trabajo», precisa el doctor Busca. Los meses del año con más incidentes domésticos son «abril, agosto y diciembre» al coincidir con las vacaciones de Semana Santa, verano y Navidad.

El informe elaborado por el Ministerio de Sanidad y Consumo también recoge datos sobre los incidentes registrados en momentos de ocio. En este sentido, «el deporte esporádico y lúdico» es terreno abonado para las lesiones. Al contrario de los que ocurría en el ámbito doméstico, en este caso la mayor parte de los accidentados son hombres. El fútbol y el ciclismo son los dos deportes que registran el mayor número de percances. Caídas, aplastamientos, cortes, desgarros y choques son más habituales entre ellas, mientras que los sobreesfuerzos se ceban más con ellos.

El estudio también revela que los hombres se lesionan más los fines de semana, mientras que las mujeres lo hacen de lunes a viernes. La franja de edad «más peligrosa» abarca de los 25 a los 44 años al acaparar el 38,6% de los accidentes. Las extremidades superiores e inferiores son las partes más vulnerables.