Serbios y kosovares escenifican sus diferencias ante la 'troika'

Las delegaciones serbia y albano-kosovar volvieron a topar ayer en Bruselas con sus irreconciliables diferencias sobre la conflictiva provincia de Kosovo. Una reunión de varias horas en presencia de la 'troika' internacional integrada por diplomáticos de la Unión Europea, Estados Unidos y Rusia, que actúa como mediadora, sirvió sólo para emitir un comunicado en el que se informaba de que las propuestas respectivas han sido explicadas «con gran detalle».

«Belgrado ha descrito su proyecto de autonomía para Kosovo dentro de Serbia», mientras que Pristina «ha desarrollado su plan basado en la amistad y cooperación entre dos estados independientes y la plena aplicación de los derechos de las minorías», refleja el documento.

Ambas partes reafirmaron también el compromiso contraído en Viena el 30 de agosto, y reiterado en Nueva York el 28 de septiembre, de que se abstendrán de realizar «cualquier acto o declaración provocadora» que pueda poner en peligro la seguridad y la estabilidad de la región o el diálogo directo.

Los mediadores internacionales recordaron a las partes su deseo de que las elecciones que se celebrarán en Kosovo el 17 de noviembre registren una «plena participación de todas las comunidades» y tengan lugar «en una atmósfera de calma y orden».