Scola llega a Houston para firmar y conocer la estructura del club

Luis Scola voló anoche a Houston, la ciudad que pone nombre a su 'sueño NBA'. Aunque en un principio había descartado esta opción, el «revuelo» despertado en la ciudad tejana, según señaló ayer su representante, Claudio Villanueva, ha precipitado los acontecimientos. El todavía capitán azulgrana pasará un máximo de tres días ya que el viernes tiene previsto regresar a su Buenos Aires natal.

El viaje, asimismo, responde a la invitación de los Rockets, que le contratarán por las tres próximas temporadas, para que se familitarice con la estructura del club, conozca el pabellón Toyota Center o la idionsincrasia de la ciudad. Incluso está previsto que el ala-pívot participe en alguna rueda de prensa con los medios locales.

Según ha revelado el 'Houston Chronicle', Scola percibirá un total de 9,3 millones de dólares por su trienio al servicio de 'los cohetes'. Asimismo, recibirá otro jugoso pellizco gracias a los derechos de imagen. En total, podría ingresar alrededor de once millones de dólares (más de ocho millones de euros al cambio actual). Aparte, la franquicia de Houston contribuirá con 500.000 dólares -el máximo permitido por el convenio de la NBA- en el abono de su clásula de rescisión con el TAU Cerámica, cuyo montante se mantiene aún en la más estricta confidencialidad.

«Trabajar duro»

A pesar de que resta la desvinculación con el Baskonia, Scola ya ha concedido sus primeras palabras a los medios estadounidenses. «Quiero trabajar duro cada día y ayudar. Si llego a ganar un título seré la persona más feliz del mundo», le contó al 'Houston Chronicle'.

«Lo vi mucho en vídeos y es un jugador muy activo, es lo que más me gusta. Juega duro y toma buenas decisiones», le ha piropeado el que será su entrenador en los Rockets, el veterano Rick Adelman.