Vuelven las chicas picantes

Ayer fue un día histórico para la política británica, que despertaba con un nuevo primer ministro, Gordon Brown, pero también para el pop, o al menos así lo describían los medios británicos. Las componentes originales del grupo Spice Girls anunciaron su regreso, aunque sus fans no deben hacerse demasiadas ilusiones. «No es una vuelta para siempre, es sólo una gira mundial para celebrar nuestro pasado y dar las gracias a nuestros fans por su apoyo», explicaba Mel, la Spice deportiva.

Las cinco amigas -Victoria Adams, Emma Bunton, Gerri Halliwell, Melanie Chisholm y Melanie Brown- hicieron su aparición en el recién inaugurado 'O2 Arena', el reconvertido 'Millenium Dome' de Greenwich, en el sur de Londres, cogidas de la mano. «Es el primer día que estamos todas juntas desde hace años», comentó Melanie B, que resultaba a primera vista irreconocible por haber cambiado sus cabellos rizados por una melena alisada. «Puede que suene cursi», añadió Geri Halliwell, «pero anoche estaba tan contenta por nuestro reencuentro que tenía la sensación de que hoy iba a ser Navidad».

El grupo se formó en 1994 y dos años después el single 'Wannabe' fue un bombazo que se convirtió en número uno en 31 países y el más vendido en la historia de un grupo femenino. A partir de entonces se convirtieron en un fenómeno global y personalidades como Nelson Mandela o el príncipe Carlos de Inglaterra quisieron fotografiarse con ellas. Y es que, desde los Beatles, no ha habido otra banda británica que haya vendido discos a la velocidad a que lo han hecho las Spice Girls: 55 millones durante su corta carrera en común.

No han vuelto a subirse a un escenario juntas desde que Geri Halliwell dejó el grupo en 1998, pero durante años no han cesado los rumores sobre su regreso. Ahora, con treinta y tantos y «más maduras», aseguraron que regresan porque era un «ahora o nunca». Victoria, que se mostró más tímida que sus compañeras, destacó que «somos también madres, nuestra prioridad es la familia, pero volvemos en cierto modo por nuestros hijos». Y por los 14 millones de euros que, al parecer, se embolsará cada una.