Un helicóptero de rescate lo avistó y ha podido ser rescatado tras permanecer casi dos días perdido por el pirineo gerundese. La pesadilla comenzó cuando practicaba snowboard y su compañera perdió la pista de Albert. Se extravió. Perdió la orientación. Pero el mismo ha contado que no se amedrentó. Pasó mucho frío y eso le obligó a reaccionar, cuenta felizmente Albert. Y lo hizo levantando una especie de campaña para refugiarse y protegerse de las bajísimas temperaturas del pirineo. Gracias a su pericia ha salvado su vida, aunque reconoce que ha pasado malos momentos en la soledad, cuando estaban...