El Gobierno está intentando calmar los ánimos de los jueces para evitar que lleven a cabo la primera huelga de su historia. El Ministerio de Justicia ha convocado a las cuatro asociaciones de jueces para sentarse a dialogar. La situación, sin embargo, es complicada: la mitad de los jueces quieren ir a la huelga. La otra mitad también, pero prefieren dar al Gobierno un plazo de seis meses para que cumpla con sus exigencias. Mientras tanto, el PSOE ha pedido la comparecencia en el Congreso de estas cuatro asociaciones.