Desde el viernes están sin luz y hasta hoy no han conseguido un grupo electrógeno. Estos aparatos están muy solicitados en Galicia, porque en 36.000 hogares no han recuperado el suministro eléctrico. El teléfono fijo tampoco funciona. El viento que derribó decenas de árboles arrancó también el tendido y en 14.000 viviendas han perdido la señal. Los que mantienen las tradicionales cocinas de leña han podido al menos guisar. Muchos aún así han perdido los alimentos por la falta de electricidad. Y hoy ya se preparan para una cuarta noche en tinieblas.