Una extraña coincidencia ha puesto en alerta a muchos vecinos del barrio madrileño de Malasaña. Dicen, que al menos diez perros han muerto con los mismos síntomas en los últimos meses. Se les hincha la cabeza y empiezan a vomitar. Los perros pasean traquilos pero sus dueños no les pierden de vistas. Temen que el suyo sea la próxima víctima. Laura, la dueña de una cafeteria del barrio, se ha propuesto acabar con esto y ha empapelado el barrio de carteles, y ha corrido la voz para que todos los dueños de perros estén alerta. Con el nuevo codigo penal en la mano, el autor de estos hechos...