Este fin de semana, al menos una treintena de personas han resultado heridas en la ciudad de Jahra, en Kuwait, durante las protestas que se extienden por el mundo árabe y que tienen como objeto manifestar su disconformidad con los gobiernos. En la concentración, la Policía kuwaití empleó gases lacrimógenos contra cerca de 300 árabes sin nacionalidad que aprovechan el contexto para reclamar la nacionalidad, lo que les daría acceso gratuito a educación, asistencia sanitaria y mejores oportunidades de trabajo.