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Las angulas capturadas en las dos últimas operaciones llegaron a Gipuzkoa en cajas de poliespan para ser introducidas en los ríos guipuzcoanos.

TRÁFICO DE ANGULAS, UN SUCULENTO COMERCIO

Los chinos capitalizan las compras ilícitas, las engordan y venden ya como anguilas a Japón y otros países. La disminución de la especie japónica lleva a los traficantes a buscar capturas para el mercado asiático en otros lugares del mundo

JAVIER PEÑALBA

Martes, 24 de abril 2018, 14:01

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La presión sobre la angula se estrecha. La demanda de los mercados asiáticos, donde la especie es altamente valorada desde el punto de culinario empieza a poner en riesgo a las diferentes poblaciones. Su comercio ilegal se extiende y la amenaza es cada vez mayor. Su tráfico ilícito empieza a generar beneficios superiores incluso al de determinadas drogas. Un kilo de este suculento manjar puede reportar hasta 7.500 euros. En los últimos años los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado han intensificado la vigilancia sobre la especie, cuya comercialización, si bien no está prohibida solo puede efectuarse bajo estrictas medidas de control.

La anguila está en una encrucijada. La especie que proliferó en todas las cuencas de la península no atraviesa sus mejores horas, aun cuando en los últimos años parece haberse observado un esperanzador repunte en Euskadi. La sobrepesca es sin duda uno de los factores que han contribuido a este declive y su escasez le ha convertido en un producto muy cotizado, tanto que organizaciones criminales se han interesado por su compraventa.

La delicada situación llevó a las autoridades europeas a adoptar diversas medidas desde el inicio de este siglo y en 2009 consiguió que se incluyese la especie europea, 'Anguilla anguilla', en el Apéndice II de CITES (Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre) que, aunque permite el comercio, lo hace bajo estrictas medidas de control documental y físico. Pero aquella decisión no fue suficiente. Las capturas continuaron, de manera que la Unión Europea decretó un «cupo cero» con el objetivo que todo movimiento con terceros países quedara prohibido.

Pese a todo, el cerco sobre la especie no ha cesado. Hay grupos que siguen traficando con toneladas de ejemplares. «Como bien se conoce, los japoneses son grandes consumidores de pescado y también de anguila. Su especie es la japónica y dado que en los últimos años sus capturas han disminuido no tienen suficiente para abastecer su propio mercado. Por ello, los chinos empezaron a comprar angulas por todo el mundo y siguen haciéndolo. Las adquieren vivas, las engordan allí y luego las venden», explica Estibaliz Díaz, bióloga del Área de Gestión Pesquera Sostenible de Azti, referente en la investigación de la anguila y asesora del Ministerio del Medio Ambiente. Además, gestiona con el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) la puesta en libertad de las especies capturadas.

Alteración del mercado

Este interés de comerciantes chinos por hacer acopio de los alevines de anguilas ha terminado por alterar por completo las reglas del mercado. Las transacciones se hacen de forma ilícita y detrás de las mismas hay organizaciones que pagan importantes sumas de dinero pues, a su vez, ellas mismas obtienen beneficios desorbitados.

Se calcula que por cada kilo de angulas que sale de España, el grupo que controla las exportaciones ilegales puede obtener un beneficio de 7.500 euros. «Sucede que en cuanto hay una persona que está dispuesta a apagar una elevada cantidad por las angulas, el incentivo por la especie es mayor», recuerda Estibaliz Díaz.

Fuentes consultadas afirman que las mafias que mueven los hilos del comercio ilegal de angula que luego es enviada a Asia no se nutren de un único mercado. Francia, Marruecos, España, Portugal, Estados Unidos, India... proporcionan ejemplares. Recientemente, la Guardia Civil detuvo a diez personas de nacionalidades española, china y marroquí dedicada a este contrabando. La trama había establecido su base de operaciones en España, aunque contaba con ramificaciones en Portugal y Marruecos.

La bióloga de Azti recuerda que este año, las operaciones policiales han aumentado. «La explicación está en que las capturas de la angula japonesa han sido más bajas que nunca y de ahí que las organizaciones hayan puesto la mirada en otras partes del mundo».

En maletas

Los grupos que se dedican a la comercialización ilegal ponen en práctica distintos métodos para el transportes de las angulas a Asia. En una primera fase llevan a cabo la recogida de los individuos que bien puede proceder directamente de pescadores, mayoristas u otros comercializadores. La organización los mantiene vivos en instalaciones controladas por ellos mismos y cuando logran reunir un número determinado preparan su envío.

Cualquier sistema es bueno para viajar. Se han dado casos en los que las angulas iban camufladas en cargamentos declarados como percebes con destino a Vietnam. Estaban en cajas de poliespam blanco acondicionadas con agua y botellas con hielo. También se han detectado angulas dentro de bolsas de plástico herméticamente cerradas que a su vez iban en maletas. En Algeciras, la Guardia Civil halló en marzo, un cargamento de 5.000 kilos. Todas iban escondidas en 364 maletas. En otras ocasiones, los grupos han utilizado 'mulas' para el transporte. En la mayoría de veces, la mercancía estaba preparadas para ser enviada en avión a través del aeropuerto de Barajas.

Lo único positivo de esta situación es que los miles de individuos decomisados por la Guardia Civil han ido a parar a los ríos guipuzcoanos, los últimos al Oria. «Mientras sepamos que sanitariamente no hay problema y que efectivamente se trata de la especie 'Anguilla anguilla', no tenemos problema en recibirlas y devolverlas en nuestros ríos», afirma Aitor Lekuona, del Servicio de Fauna y Flora Silvestre de la Diputación.

El experto recuerda que «no es casualidad» que se hayan soltado en Gipuzkoa. «Esto obedece a que llevamos muchos años estudiando la situación de la anguila en nuestros ríos y estuarios, estudiando el frente de colonización, el potencial reproductor y otros indicadores. Hemos hecho también ensayos para ver que método es el más adecuado para hacer repoblaciones. De alguna manera, entiendo que hemos ofrecido garantías para que la suelta se haya realizado aquí».

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