Cariño y reconocimiento

En el acto intervinieron Roberto Larrañaga, presidente de Confebask, que se preguntó en voz alta «¿para qué tanto tanto dolor?», e Iñigo Urkullu, lehendakari del Gobierno vasco, que dijo tajantemente que «no hay justificación para la violencia, fue radicalmente injusta». Al escenario del Euskalduna subieron en nombre de todas las víctimas María Uria, Cándido Korta y Cristina Berazadi, que recibieron el cariño de los asistentes, que les ovacionaron puestos en pie durante varios minutos. Recibieron una flor de manos de los presidentes de las patronales vascas, Iñaki Garcinuño (Cebek), Pascal Gómez (SEA) y Pello Guibelalde (Adegi).

Al evento, presentado por Pedro García Larragán, acudió una nutrida representación institucional y empresarial. Estuvieron Juan María Aburto, alcalde de Bilbao; Unai Rementería, diputado general de Bizkaia; los diputados José María Iruarrizaga, Teresa Laespada y Vicente Reyes; los consejeros del Ejecutivo vasco, Josu Erkoreka, Arantxa Tapia, Pedro Azpiazu, Estefanía Beltrán de Heredia, Jon Darpón, Bingen Zupiria, Cristina Uriarte, Iñaki Arriola, Alfredo Retortillo y María Jesús San José; Bakartzo Tejeria, presidenta del Parlamento vasco; Ana Otadui, presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia; Javier de Andrés, delegado del Gobierno; e Imanol Landa, alcalde de Getxo y presidente de Eudel.

No faltaron a la cita políticos como Andoni Ortuzar (PNV), Idoia Mendia (PSE), Alfonso Alonso y Raquel González (PP), Eduardo Maura (Podemos), José Antonio Pastor, Alfonso Gil, Gonzalo Machín, Jesús Isasi, Nerea Llanos, Mikel Torres, alcalde de Portugalete, Juan Marí Atutxa y Raúl Arza, secretario general de UGT.

En primera fila se situaron quienes lideraron las patronales en los momentos más duros, Baltasar Errazti, José Guillemo Zubia, Miguel Lazpiur, Román Knörr, Gregorio Rojo, Txema Vázquez Eguskiza, Miguel Ángel Lujua, Fran Azpiazu, Eduardo Aréchaga, José María Ruiz Urchegui o Nuria López de Guereñu. También se encontraban en esas primeras filas Nieves Gómez Montoya, Jaione o Miren Uria, que sufrieron en primera persona la violencia. Asimismo acudieron Emilio Titos, Emiliano López Atxurra, José María Bergareche, Íñigo Barrenechea, Alejandro Echevarría, Iñaki Arechabaleta, Javier Ormazabal, Fernando Olmos, Pedro Hernández, Idoia e Iñigo Olabarri, Óscar Landeta, Jesús Alberdi, Koldo Arandia, Ricardo González, Jesús Alberdi, José Luis López Gil, Carolina Pérez Toledo, Rafael García Santiuste, Andrés Vilariño y Javier Urizarbarrena.

También estuvieron Antonio Garamendi, presidente de Cepyme, Rafael Careaga, Josu Lapatza, Jesús Guibelalde, Josu Sánchez, Mikel Arieta-Araunabeña, Luis Ramón Arrieta, Vicente Atxa, rector de Mondragon Unibertsitatea; José María Guibert, rector de la Universidad de Deuso; Mario Iceta, obispo de Bilbao; Asís Canales, Enrique Portocarrero, Izaskun Sáenz de la Fuente, Javier Arellano, Alberto García Erauzkin, Francisco Allende, Patxi Artetxe,Julián Ruiz, Toribio Martín, Pedro Campo, Antonio Monasterio, Julián Gómez, Manu Ardanza, Javier Zárraga, Julia Diéguez, Alejandra Alegría, Pedro Ensunza, Jesús Ángel Bravo, Jesús Esmoris, Amaia Gorostiza, Eduardo Junkera, José Javier Arteche, Jon Arteta, Tomás Arrieta, Patxi y Edurne Errazti, Alex Artetxe, Patricia Arias, Alex Belaustegui, Ignacio Sáenz de Gorbea, Jesús Hermosilla, Agustín Garmendia y Ana Mijangos.