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La bilbaína está muy feliz por conseguir la medalla de oro en Murcia.
«El taekwondo ayuda a quitar el miedo escénico a la hora de hablar en público»
Jone Magdaleno | Gimnástico Bilbao

«El taekwondo ayuda a quitar el miedo escénico a la hora de hablar en público»

Campeona de España universitaria de taekwondo

Eduardo Izquierdo

Miércoles, 25 de mayo 2016, 10:06

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Una vez superado el primer año como senior, tras acometer un importante salto al dejar de competir contra gente de su edad y medirse a rivales más experimentadas y curtidas en el taekwondo, Jone Magdaleno atravesaba un buen momento. Aunque «siempre cuesta», ya estaba amoldada a la categoría y muy contenta por el rendimiento que estaba plasmando en los tatamis. Prueba de ello fue la llamada de la selección española para tomar parte en el Open de Marruecos, un G1 puntuable para los Juegos Olímpicos, donde se clasificó en tercera posición. Posteriormente repitió convocatoria para disputar el Open de Bélgica, del mismo nivel que el anterior y donde mejoró plaza al quedar segunda. Estas actuaciones le sirvieron para ascender en el ranking clasificatorio de cara a Tokio 2020 y ocupa ya el lugar 71. «Como le sucede a cualquier deportista, competir en una cita de esa envergadura es el mayor reto», afirma. Pero esta magnífica trayectoria se truncó con motivo del Campeonato de España sub21. Una derrota en primera ronda le martirizó y le ha condicionado en otros torneos. «No sé si salí descentrada o qué. Lo denomino modo planta. No hice nada y no exploté mis cualidades. Era un títutlo bastante asequible. A veces, la cabeza de traiciona», asevera la componente del Gimnástico Bilbao.

Para romper con esa dinámica se presentó al Campeonato de España Universitario, que se celebró en Murcia a principios de mayo. Por su mente solo pasaba el poder desquitarse del mal papel anterior y debutar bajo los colores de la Universidad de Deusto. «Solo por el hecho de participar me hacía mucha ilusión ya que siempre he querido estudiar Derecho allí», apunta Magdaleno, que entró de cabeza de serie y se estrenó en semifinales. Le correspondió medirse a una catalana y afrontó el combate con mucha incertidumbre, más que por el nivel de la contrincante por su estado psicológico. «Estaba muy tensa y agarrotada, lo cual te suele complicar. También estaba algo nerviosa. Conseguí derrotarle, aunque muy justo», apostilla. La victoria le serenó de cara a la final. Allí le esperaba una gallega. «Resultó más sencillo. Además, tuve la ayuda de mis entrenadores, Arturo y Marisa, que son mis padres. Solo su presencia ya es un punto de apoyo fundamental. Especialmente les quiero agradecer, tanto a ellos como a mi club, la implicación que tienen con mis compañeros y conmigo», puntualiza.

Jone espera que este entorchado suponga un punto de inflexión en la campaña. En su agenda, aunque todavía está sin cerrar, se atisba el Campeonato de Europa Universitario. «Estoy a la espera. En Deusto están bastante animados y lo están valorando. Tengo mucha ilusión por acudir. Además, me están apoyando en todo», subraya. Lo que ya ha cerrado será el viaje a las Antípodas a principios de julio junto a su compañera Elaia Torrontegui. «Nos vamos a Australia a entrenar. Desde el club se están portando muy bien. Nos sacan a prepararnos a otros lugares y se implican. Se están portando muy bien. Encima iré con Elaia. Es mi referente. Cuando llegué al club era ya top y tendría mi edad, más o menos. Me ha ayudado a la hora de afrontar los combates, a trabajar el aspecto psicológico y la preparación física. Vive en Madrid y cuando puede venir, se acerca al gimnasio», matiza.

Contracturas

Hasta hace bien poco, Magdaleno solo se ejercitaba en técnica y poomsae, porque le daban «miedo», los combates. Ahora tiene muy claro por qué disciplina decantarse. «Indudablemente me quedo con la segunda. La técnica es muy bonita y también requiere mucho sacrificio, aunque te cansa un poco. Pero si estoy a este nivel es gracias a la base que tengo de haberla practicado. Te favorece a la hora de competir al haber adquirido esos fundamentos», explica la joven taekwondista, que apuesta por no encajar puntos como estrategia en las peleas. «Me han inculcado que es lo más importante. Si te meten, ya vas por debajo».

El taekwondo le ha aportado valores que le han servido para ponerlos en práctica en su día a día. Entre todos destaca el respeto. «Sucede en todas las artes marciales. También me ha enseñado a ser disciplinada, sobre todo al compaginarlo con los estudios. En Deusto y en colegio me han dado muchas facilidades. Hasta ahora lo estoy sacando bastante bien. Y, aunque parezca una tontería, cuando compites en técnica, lo haces sola, ante cinco jueces que te evalúan, te sirve luego para hablar en público o la hora de realizar una presentación, ya que quitas el miedo escénico y lo haces sin problemas», expone Jone, que poco a poco también ha ido aparcando la ansiedad en los momentos previos a saltar al tatami. «Antes me ponía muy nerviosa, principalmente en las citas internacionales. Incluso se me contracturaba el cuello».

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