Borrar

«Subí al alféizar para que parara, pero vino hacia mí como loco y no tuve más remedio que saltar»

El estremecedor relato de la mujer que quedó parapléjica en la última paliza de su marido en la localidad cántabra de Polanco

CONSUELO DE LA PEÑA

Jueves, 30 de marzo 2017, 17:02

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«Me arrastró por los pelos, me insultó y no dejaba de golpearme (...) Me subí al alféizar de la ventana, porque no me dejaba salir de la habitación. Confiaba en que así desistiría, pero vino hacia mí como loco y no me quedó más remedio que saltar...». Entre sollozos, la mujer que quedó parapléjica después de sufrir el último ataque de su pareja relató el infierno que vivía desde el principio de su relación con Rosendo M. R, que se enfrenta a 21 años y tres meses de cárcel por la paliza que la dejó en silla de ruedas.

Ella fue la segunda en prestar su versión de los hechos, después de que el acusado negara haberle pegado «nunca». Más aún, aseguró que su relación era «normal, buena, muy buena». Pero la mujer contó la otra parte y detallado algunos episodios de maltrato, que al principio de convivir «eran verbales» pero que ya a los dos meses «empezó a pegarme». Según su testimonio, el día que ocurrieron los hechos que ahora se juzgan, después de saltar por la ventana escapando de él y quedar tirada en el suelo, su marido bajó al minuto. «Yo no sentía las piernas, pero él me arrastró. Le rogué que me dejara, pero él continuó arrastrándome, pateándome la barriga y moviéndome las piernas (...)». Mientras esto pasaba, cuenta la mujer que el hijo de ambos, de tres años de edad, lo estaba presenciando todo, «el niño lloraba y pedía a su padre que no me matara». Al final, el agresor entró en la casa y se fue a dormir.

La versión de la víctima coincide con el relato de los hechos del Ministerio Fiscal, en los que se explica que cuando el marido se metió dentro de la casa, la mujer pidió al niño que le acercara el teléfono móvil. «Llamé a mis padres y a la Guardia Civil», contó.

El acusado niega los hechos

El hombre acusado de dejar parapléjica a su pareja de una paliza y provocar que ella se tirara por la ventana para escapar de él, niega haberle pegado «nunca». Más aún, asegura que su relación «era normal, buena, muy buena» y dice que apenas recuerda lo que pasó aquel fatídico día porque estaba borracho. Son algunas de las declaraciones que el acusado, Rosendo M. S., hizo en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, donde está siendo juzgado por unos hechos ocurridos el 30 de mayo de 2015, cuando golpeó a su mujer en reiteradas ocasiones hasta que ella saltó por la ventana, por los cuales la Fiscalía le pide 21 años y tres meses de prisión.

La agresión tuvo lugar en el chalé en el que ambos convivían, en Polanco, y en presencia de su hijo de tres años, según el relato de los hechos. Pero Rosendo M. S. dice que «no recuerda» que el niño estuviera allí. A consencuencia de las lesiones, la mujer tuvo que ser operada en el Hospital Valdecilla y, posteriormente, permaneció casi nueve meses ingresada en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo.

Se le acusa de seguir propinándole golpes y patadas una vez que ella yacía en el suelo del jardín tras caer por la ventana. Pero él negó que esto hubiera pasado así. Dice que cuando la vio en el suelo «la cogí y la llevé hasta la puerta, donde había algo de luz», y que le dijo: «venga, Conchi, levántate, no me tomes el pelo». Admitió que después la dejó allí tirada y se fue a la cama, pero lo ha justificado por su estado etílico: «Si no hubiera estado bebido, la habría atendido y llamado a una ambulancia». Sin embargo, los forenses encontraron en el cuerpo de la mujer signos de haber sido golpeada antes de caer y luego arrastrada.

En su declaración en la Audiencia, el acusado solo reconoció que «pude humillarla verbalmente y con gestos», pero insistió en que «nunca le pegué». Y aseguró que siempre que se desencadenaron discusiones en la pareja fue «porque había bebido» y motivadas porque «ella dormía con el niño y no conmigo», para rematar que, en líneas generales, su relación «era buenísima».

Parapléjica con parálisis total

Como resultado de las múltiples lesiones, la mujer sufre paraplejia completa con parálisis total y anestesia de miembros inferiores, secuelas psiquiátricas graves y artrosis en el hombro, entre otras dolencias. Por todas ellas, así como por los daños morales y la perdida de la autonomía en su vida diaria, el fiscal reclama para la mujer una indemnización de 877.000 euros.

Además, el niño recibió tratamiento por un trastorno de estrés agudo del que está en seguimiento aunque, por el momento, no presenta secuela alguna. La Fiscalía solicita una indemnización para el menor de 18.900 euros.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios