Borrar
Ángel Benito estudió Derecho y es primo de uno de los dos fundadores de la web, creada en 1999. Trabaja allí prácticamente desde el principio.
18 años haciendo el 'vago'

18 años haciendo el 'vago'

La web que ha ayudado a generaciones de estudiantes a sacarse la carrera llega a la mayoría de edad. «Los profesores han dejado de vernos como el demonio», se felicita Ángel Benito, uno de los nueve empleados de la web, que ofrece gratis 120.000 apuntes, exámenes y test

Yolanda Veiga

Lunes, 30 de mayo 2016, 18:03

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Derecho sigue siendo una carrera con futuro y Filología Portuguesa, una anécdota... con perdón. Son las carreras a la cabeza y a la cola de un ranking elaborado por 'El rincón del vago'. La web que ha ayudado a licenciarse a varias generaciones de estudiantes acaba de alcanzar la mayoría de edad, 18 años, la edad de entrar a la Universidad. ¡Y con el trabajo hecho!

Más de 120.000 documentos, entre apuntes (2.827 sobre Derecho y uno solo sobre Filología Portuguesa), exámenes y hasta consejos para preparar las chuletas, un campo donde ha habido poco avance tecnológico porque se sigue recurriendo a la clásica técnica del calcetín o la manga del jersey (por dentro, claro). En esta suerte de enciclopedia online hay desde tesis doctorales, hasta una clasificación sobre instrumentos de laboratorio que es el documento más consultado -hasta 20.000 clicks en un solo día- recomendaciones para hacer un comentario de texto -no abuses de los 'muy', 'también', porque', 'y', 'pero', no lo redactes de un modo muy personal...- y tests básicos de enfermería -¿cómo se llaman las células del sistema nervioso? neuronas, liposomas, centronas o albuimomas. ¿Con cuántas neuronas puede relacionarse una neurona? De 1 a 10.000.000, de 1.000 a 10.000, con una, con veinte...-.

Cada día reciben 35 nuevos documentos y tienen todavía 20.000 sin clasificar. De filtrar los documentos, asegurarse que no tienen copyright y ordenarlos por categorías se encarga un equipo de nueve personas con Ángel Benito (Salamanca, 44 años) al frente. No fue socio fundador pero casi. «Mi primo Miguel Ángel Rodero y su amigo Javier Castellanos estudiaban Informática en la Universidad Pontificia de Salamanca. Un profesor les mandó un trabajo de religión que no les apetecía hacer. Miraron a ver si había algo hecho en la red, que entonces era algo incipiente, y no encontraron nada. Entonces se les ocurrió montar una web a la que la gente donara trabajos voluntariamente que luego pudieran descargar gratis, aunque en aquellos años, finales de los 90, poca gente sabía qué era internet».

A él le llamó su primo para que se hiciera cargo de la parte legal y presume de que en dieciocho años no han tenido un solo juicio. «Ante la mínima duda, retiramos el documento, como aquella vez que un profesor de la Universidad de Oviedo llamó para decir que un alumno suyo nos había mandado unos apuntes que había redactado él. Lo miramos y llegamos a la conclusión de que aunque el chaval había enviado lo que él apuntó, los había redactado y creado el profesor y sí tenían propiedad intelectual. Otra cosa es un examen que prepara un maestro y en el que pregunta en qué año murió Cervantes o quién escribió 'La Celestina', pues mucho trabajo intelectual no hay...». Para evitar sustos los gestores de 'El rincón del vago' exigen al remitente siempre una prueba de autoría de lo que envía y hay documentos que se rechazan de entrada: «Una vez nos mandaron un manual de un televisor Philips y no lo subimos porque eso sí tiene copyright. Y ahora nuestro debate es si los tuits tienen propiedad intelectual o no, hay dos corrientes de opinión contrarias». Salvado el escollo legal, hacen «una somera revisión» del contenido. «Nos mandan documentos de Física Cuántica o Matemáticas Avanzadas, materias de las que no podemos tener conocimiento».

«Pero hijo, ¿ese qué trabajo es?»

Entre 70.000 y 80.000 personas han enviado en estas casi dos décadas textos a la web, que pasó de anécdota a negocio «gracias al boca oreja». «Fue tal la fama que cogió que las agencias de publicidad venían a buscarnos a nosotros y no al revés. Y en la oficina de Salamanca los estudiantes se sacaban fotos con el logo del buitre, que se eligió porque es el animal que más necesidad pasa». Una metáfora que a los chavales les hizo gracia, pero que a los creadores a veces les ha pesado. «Si nos llamásemos como nuestra competencia, 'monográficos.com', sería distinto pero con este nombre tan pícaro... El problema es que cuando el negocio explotó estaba tan consolidada la marca que ya no lo cambiamos».

¿Y cómo lo contaron en casa?

Yo trabajaba de secretario interventor en tres ayuntamientos y lo dejé por 'El rincón del vago'. Mi madre me decía: 'Pero, ¿eso qué clase de trabajo es, ya tendrá futuro?'. A todo el mundo le parecía chocante, era una idea peregrina. No sabían si era una moda o el futuro, yo por entonces no tenía no móvil, pero nos hemos ganado bien la vida.

Con la crisis de las punto.com, a comienzos del nuevo milenio, pasaron a formar parte de Eresmás, luego de Wanadoo y ahora pertenecen a Orange. Los tres trabajadores iniciales se han convertido en nueve (los dos fundadores lo dejaron hace un par de años y desde el principio ya solo está Ángel) y se ha abierto una réplica de este portal en Francia (en el futuro Orange creará webs iguales en en Gran Bretaña, países árabes...).

Piropos y horóscopo

  • 'El rincón del vago' nació en la Universidad de Salamanca, tiene guasa la cosa... pero hoy el público mayoritario es latinoamericano. «Nuestro primer país de audiencia es México, luego Colombia y, en tercer lugar, España. En Chile, por ejemplo, hay una tasa de conexión a internet más alta que es nuestro país». Cuenta Ángel Benito que ellos son los principales usuarios no solo de los documentos académicos, también de los 'otros'. De los amorosos, porque la web incluye una sección 'rosa' en la que los internautas cuelgan piropos ('¡Yo quiero ser aguacate para embarrarme en tus tortas!' (sic)), orientan sobre la compatibilidad de las parejas en función del signo zodiacal de ambos, ofrecen pócimas mágicas con pétalos de flor y vino blanco para atraer a un amor no correspondido y aconsejan sobre técnicas de enamoramiento, que chirrían por lo estereotipadas que son. «En Latinoamérica no lo consideran tan trasnochado y tiene un tirón enorme pero es verdad que llevamos años sin meter mano a esos contenidos». Hora pues de 'actualizar' los apuntes.

Pero ha habido otra frontera que les ha costado más traspasar que la geográfica: los profesores. «Un catedrático emérito de Granada nos contactó al principio y nos dijo que había sido militar en tiempos de Franco, que tenía 83 años pero aún le quedaban fuerzas para coger el fusil y hacernos subir al monte. Muchos maestros nos han llamado para decirnos que éramos el demonio, incluso querían demandarnos, pero ya no nos ven así. Empiezan a considerarnos parte de la comunidad educativa. Hace poco llamó un profesor de Alicante para cedernos todos sus apuntes de matemáticas del curso entero: 'Colgarlos en la página, que mis alumnos los van a encontrar ahí antes que en la fotocopiadora', nos dijo».

Los que están encantados son los estudiantes, aunque algunos le echan un morro...: «Cada día recibimos diez o doce llamadas de chavales que nos dicen que han copiado un trabajo entero de la web y que por favor lo retiremos durante unos días porque el profesor les ha dicho que como se entere de que han copiado de 'El rincón del vago' les suspende». La idea no es esa: «Tenemos trabajos buenísimos y es una magnífica fuente de documentación. Yo tengo una hija de 10 años, todavía no usa la web pero no me importaría que la utilizara. Para consultas, no para que fusile un texto entero, claro».

Pero no solo los estudiantes se han aprovechado del trabajo que han hecho otros. «Un político en Colombia utilizó contenido nuestro para un proyecto de ley y, aquí mismo, la Junta de Castilla León pagó 100.000 euros a una empresa para que hiciera un informe de la urbanización del Puerto de San Glorio, donde estaba proyectada una estación de esquí. Cogieron un informe que teníamos colgado de otra estación y copiaron el 95%, apenas cambiaron el nombre de la estación de esquí y poco más. Salimos en el diario de sesiones de las Cortes porque había párrafos enteros reproducidos literalmente».

La nueva generación de 'vaguitos'

El plagio no es el objetivo, sino crear un fondo documental de consulta. «Nuestro público principal son estudiantes de entre 18 y 23 años, pero el segundo grupo más numeroso son gente mayor de 55 años». También niños de Primaria: «Un día nos escribió un chaval de California contándonos que entraba a nuestra página para ayudarse con los deberes porque su madre había sido usuaria nuestra en los años de la Universidad. Así que ya tenemos a una segunda generación de 'vaguitos'».

Además, alega Ángel, si no estuvieran ellos, los estudiantes copiarían la Wikipedia. Un riesgo que hoy lo es más que antes porque «los profesores cuentan con herramientas antiplagio capaces de determinar que un trabajo ha sido plagiado en un 82% de 'El rincón del vago', un 8% de Google y un 10% de la Wikipedia». Lo que vendría a ser la versión moderna y online de una práctica antigua. «A mí, en la Universidad, un profesor me puso matrícula de honor por un trabajo de Derecho Procesal en el que copié todo de un libro que él mismo había escrito». Una pequeña ayudita para el estudiante sobresaliente que Ángel siempre fue: «Era un poco empollón».

¿Alguna vez haría una chuleta, no?

Sí, alguna vez sí. En mi época se estilaba enrollar un papel escrito en el boli o anotar los apuntes en el papel que envuelve las botellas de agua. Luego lo pegabas con cuidado y tenías que leer a través del plástico.

A los que les toca empollar ahora es a los estudiantes que entre el próximo 6 y 16 de junio se enfrentan a los exámenes de Selectividad. Ellos están haciendo echar humo a la web de 'El rincón del vago'. «Observando qué documentos descargan más puedes hacerte una idea de lo que están estudiando en cada momentos en los colegios. Este año los internautas han buscado mucha información sobre Cervantes, con motivo del 400 aniversario de su muerte, y sobre 'La vida es sueño', de Calderón de la Barca».

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios