El PP utilizará de nuevo la RGI para criticar la gestión del PNV en las ayudas sociales

Pese a la oferta de mano tendida y su voluntad de evitar la confrontación con el nacionalismo en clave identitaria, los populares mantendrán un perfil propio. De hecho, aprovecharán la recta final de la legislatura para cuestionar la gestión del Gobierno de Iñigo Urkullu en asuntos sensibles como las ayudas sociales y las políticas activas de empleo. Así, ultiman la presentación de una proposición de ley para volver a llevar al Parlamento una modificación de la Renta de Garantía de Ingresos después de que la Cámara diera carpetazo a la iniciativa legislativa popular que abanderaba Javier Maroto.

En aquella ocasión, la propuesta para endurecer los requisitos de acceso de los inmigrantes a la RGI, respaldada por 40.000 firmas a través de la plataforma Ayudas+Justas, fue tumbada con los votos del PNV, EH Bildu, PSE y UPyD. Los partidos denunciaron el «uso ilegítimo» de una demanda que «nació en el laboratorio de ideas del PP» y que, en su opinión, «ha incendiado la convivencia». Por su parte, el exalcalde de Vitoria interpretó el rechazo como «una patada en la boca» a los «40.000 vascos que dicen «ayudas sí», pero «sin abusos».

Seis meses después del portazo, los populares han decidido volver a la carga con la RGI con una proposición de ley cuya admisión a trámite depende de un informe favorable del Gobierno vasco. El lehendakari ya ha comenzado a asumir la necesidad de introducir cambios en Lanbide. En un intento por preparar los principales ejes de su discurso, el PP presentará las bases de su propuesta social en un foro de debate organizado el sábado en Vitoria por la juntera alavesa Marta Alaña.

Familias numerosas

La mesa forma parte del calendario con el que el partido de Alfonso Alonso afronta las próximas citas electorales. Entre otros ponentes, participarán la asociación vasca de familias numerosas y la federación española de centros especiales de empleo.

El PP denunciará el «deficiente funcionamiento» de Lanbide, gestor de la RGI, para plantear un modelo que «no cronifique» a los usuarios y evite «el efecto llamada». En Euskadi, el número de parados extranjeros es «un 178% superior» al de desempleados locales. Esa misma tasa es del 42% en el conjunto de España, según los populares.

«Lanbide ha renunciado a la reinserción laboral. Funciona de puerta de entrada, pero no de salida», advierte un cargo del partido, que recuerda que la tasa de intermediación reconocida por el servicio de empleo «sólo llega a un 3,13%»

Según cálculos del PP, Lanbide ha registrado 133 millones en «pagos indebidos» en la legislatura. «Esto lastra el plan de apoyo a las familias y a las personas discapacitadas en una Euskadi cada vez más envejecida», explican las mismas fuentes.