EH Bildu, PP y UPyD piden devolver los Presupestos vascos y censuran el pacto PNV-PSE

El PNV y el PSE anunciaron ayer su tercer pacto presupuestario que permitirá al Gobierno vasco sacar adelante sus cuentas para el próximo año después de que los socialistas hayan decidido facilitar su aprobación al conseguir cambiar el destino de 35 millones de un proyecto que contempla un gasto total de 10.933 millones.

Mañana finaliza el plazo para la presentación de las enmiendas a la totalidad y parciales. Tanto EH Bildu, como PP y UPyD han confirmado este miércoles que presentarán enmiendas a la totalidad y también parciales.

Portavoces parlamentarios de estos tres grupos en la oposición han comparecido hoy por separado en ruedas de prensa en el Parlamento vasco donde han coincidido en que el proyecto presupuestario no sirve para dar respuesta a las necesidades reales de la sociedad vasca y «consolida» recortes.

Además han criticado el acuerdo presupuestario alcanzado entre el PNV y el PSE-EE, que también han dicho sólo beneficia a ambos partidos. El parlamentario del PP Anton Damborenea ha hablado incluso de un «acuerdo político» que serviría para reeditar el pacto «PNV-Zapatero» el próximo 20 de diciembre. «Tú me votas los presupuestos y a cambio yo te voto la investidura en Madrid», ha resumido Damborenea.

El parlamentario de EH Bidu Oskar Matute ha recordado que remitieron una propuesta a los socialistas para lograr revertir los «recortes» que el Gobierno vasco aplica desde 2012 y que suponía mover 420 millones de euros. Ha explicado que ayer, minutos antes de que el PSE confirmara su acuerdo con el PNV, recibieron la respuesta negativa a su propuesta y ha opinado que los socialistas nunca han considerado la "posibilidad real" de ofrecer a la sociedad unas cuentas distintas.

Matute ha pedido a la secretaria general de los socialistas vascos, Idoia Mendia, que explique qué recibe el PSE a cambio de votar el presupuesto del PNV «con los ojos cerrados y con tan bajo nivel de exigencia» y ha opinado que es una «tomadura de pelo vender como éxito» un acuerdo de 35 millones de euros. Además ha asegurado que es mentira que los socialistas hayan «paralizado» el fracking al imponer en el acuerdo que las partidas destinadas a la Sociedad de Hidrocarburos de Euskadi S.A. (Shesa), dependiente del Ejecutivo, se limiten al gas convencional. Matute ha argumentado que mantener Shesa es «mantener el fracking» porque se creó para eso.

Además ha reconocido que aunque en la memoria del presupuesto se haya eliminado el apartado referente al permiso Enara, el Boletín Oficial del Estado vinculó este permiso al de Angosto y ha dicho que el Gobierno vasco ha reconocido que ese hecho permite «aplicar los trabajos e inversiones realizados en uno de los permisos a cualesquiera de los otros indistintamente».

Fuentes socialistas han insistido en que en las enmiendas parciales que están elaborando se va garantizar que este presupuesto «cierre la puerta» al fracking. Además de la enmienda a la totalidad, EH Bildu presentará una batería de enmiendas parciales en la línea de la propuesta presentada a los socialistas.

De igual manera van a actuar los populares, que han precisado que las enmiendas parciales que presentarán mañana supondrán mover más de 400 millones con el objetivo de fomentar el empleo y salvaguardar el bienestar social.

Damborenea ha justificado su enmienda a la totalidad porque las cuentas no apuestan por el futuro y consolidan una «legislatura perdida». «El gasto clientelar de PNV y PSE se sustenta en base a mantener los recortes sociales que empezó Patxi López», ha remarcado el parlamentario popular, que ha añadido que el acuerdo entre ambos partidos es «muy bueno para ellos pero muy malo para los vascos».

El dirigente de UPyD, Gorka Maneiro, ha hablado de un «pacto político para repartirse todo y tratar de que nada cambie» y ha opinado que los socialistas han sido una vez más los «palmeros del PNV». Ha calificado las cuentas de «continuistas» y «profundamente conservadoras» y ha anunciado una enmienda a la totalidad y unas 450 enmiendas parciales para mover unos 350 millones de euros.