Sin parada nueva en el funicular de Artxanda, pero con tres ascensores

En la presentación de la iniciativa, el alcalde, Juan Mari Aburto, reconoció ese andén era un compromiso electoral de su partido, el PNV. Pero «tras muchos meses de reflexión técnica», alegó que la llegada de los elevadores mejorará con mayores garantías los desplazamientos a los habitantes en una zona más extensa.

El concejal de Obras y Servicios, Ricardo Barkala, puntualizó que la construcción de la parada intermedia conllevaba «riesgos» técnicos ante la necesidad de intervenir en la estructura del funicular. Durante la fase de obras, obligaría incluso a alterar el servicio.

La «alternativa integral» elegida consiste en la construcción de tres ascensores y tres tramos de rampas mecánicas que salvarán más de 50 metros de desnivel, en ocasiones con pendientes superiores al 16%, para capear las cuestas de camino a los edificios situados en Grupo Mirador, Abásolo, Montaño y Ciudad Jardín, donde residen cerca de 3.500 vecinos.

Las obras se llevarán a cabo durante todo el año próximo, con un presupuesto de casi 2 millones de euros, un coste que se estima ligeramente superior al que tendría la construcción de la parada intermedia del funicular.

Además de evitar fatigosas pendientes en los desplazamientos internos, el Ayuntamiento ha tratado con esta solución de facilitar los accesos de los barrios altos al centro de Bilbao, bien a pie o en metro gracias a la Línea 3.