Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
elcorreo.com
Domingo, 10 de abril 2016, 11:09
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Su cara ya hacía presagiar que podía haberse roto algún hueso. Juan Martínez de Irujo se marchó al vestuario después de tratar de devolver una pelota de Olaizola II en el torneo de Parejas. No había hecho un buen golpeo y la bola impactó directamente ...
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.