«Me siento discriminado; no estoy teniendo un trato justo»

A pesar de sus logros deportivos, el aragonés considera que las condiciones para unos mejores resultados no se le han concedido. «Si lo quieres llamar discriminado, si le quieres poner otro adjetivo... lo que te puedo decir es que no estoy teniendo un trato justo», señala cuando se le pregunta cómo se siente el reciente ganador del Abierto Holandés y cuartofinalista en el Campeonato de Europa que se disputa esta semana.

«El apoyo de la federación no es el acorde a mis resultados deportivos. Hace más de tres años que la federación dejó de apoyarme y no puedo entrenar en el pabellón dentro del Centro de Alto Rendimiento de Madrid. No puedo decir que mi situación esté mejor», comena el veterano volantista al que los responsables del cuerpo técnico prefieren situar en otro edificio mientras preparan a las prometedoras nuevas generaciones.

Abián ambiciona competir en 14 torneos al año para mantenerse en los primeros puestos de la clasificación. El reducido presupuesto de su federación le ha financiado todas sus representaciones con la selección española y cinco torneos de 2016. El aragonés suma 13 eventos pagados de su bolsillo desde 2013, según los datos de la Federación Española de Bádminton (Fesba). «Es un deporte en que si compites a nivel internacional es muy caro porque tienes que hacer viajes constantemente para mantenerte arriba en ranking mundial. Dependiendo de los campeonatos que hagas durante la temporada varía mucho», reclama el aragonés.

Las críticas del veterano deportista no se detienen en su situación individual, sino que se extienden al deporte que ha practicado a un alto nivel en la última década. «Personalmente hablando no tengo esa sensación de que el bádminton haya crecido en España. De hecho, el número de practicantes no lo indica así. Algo no se está haciendo bien porque si tenemos una campeona del mundo y no hay más participantes , creo que es preocupante», dispara.

«En cuanto a los campeonatos nacionales veo un nivel medio más bajo y mucha menos participación. En tema de organización lo mismo. Las condiciones en que se juega son mucho peores que las que se jugaban hace ocho o diez años», asegura durante una época en que la bicampeona del mundo es Carolina Marín, Enrique Peñalver y la donostiarra Clara Azurmendi son campeones del mundo júnior en sus respectivas categorías y la joven Beatriz Corrales es top-25 en la categoría absoluta.

Mejor español

En el plano deportivo, el bilbilitano se ha agarrado a su carácter indomable y contestatario para alcanzar triunfos como el oro en los I Juegos Europeos celebrados en 2015 y mantenerse como el mejor jugador español de bádminton de la historia después de ser con frecuencia la segunda mejor raqueta europea del circuito. En los Juegos Olímpicos de Río intentará sumar más de una victoria para mejorar su actuación en Londres 2012.

Para motivarse pensará en los mismos alicientes que cuando se ha sentido discriminado. «He pasado momentos muy complicados y entre ellos he pasado momentos en que te preguntas este tipo de cuestiones: ¿Por qué lo voy a dejar si se me da bien, disfruto y soy el mejor que hay en España? ¿Porque los resultados deportivos lo dicen? ¿Porque unas personas quieran que yo lo deje? Por suerte, tengo una familia detrás y unos amigos que me han arropado muchísimo y he podido salir adelante. He seguido luchando y demostrando que estoy a un alto nivel», avisa.