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Más de 15.000 personas se han presentado a los castings del programa, pero solo concursarán 15.
"Lo vamos a pasar bomba"

"Lo vamos a pasar bomba"

La edición "más divertida" de 'MasterChef', el martes en TVE. Participarán un exsoldado, una exconcejala, un campeón de artes marciales...

Yolanda Veiga

Viernes, 3 de abril 2015, 00:09

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Al casting se presentaron más de 15.000 pinches, pero solo 15 cocinarán en los fogones de MasterChef, que regresa este martes a las 22.00 horas con la tercera edición, «la más divertida». «Lo vamos a pasar bomba», promete Samantha Vallejo-Nágera, que repite de jueza junto a Pepe Rodríguez y Jordi Cruz, que abrirá a los concursantes la puerta de su restaurante, el ABaC, para que sepan lo que es servir menús en un dos estrellas Michelin. ¡Y ante semejantes invitados! El presentador Andreu Buenafuente y su pareja, Silvia Abril, la cantante Mónica Naranjo, el humorista Carlos Latre, el futbolista Carles Puyol, el diseñador Juanjo Oliva y las modelos Laura Ponte y Judit Mascó juzgarán el plato (atún rojo) desde la mesa... y también en la misma cocina. «Andreu no fue capaz de estarse quieto. Entró a ver cómo cocinaban los concursantes y a tocarles las narices. En un momento se le oye decir: ¡Nunca había sentido que estorbaba tanto antes!».

La cadena no ha desvelado la identidad de los participantes, aunque adelanta que habrá un exsoldado profesional, una inmigrante que aprendió a cocinar en el servicio doméstico, un estudiante de Medicina, una exconcejala y un campeón de artes marciales. Los presentará en el primer programa, que se emitirá este día 7 y que mostrará los castings. De 15.000 aspirantes (un 70% más que en la anterior edición) pasaron la penúltima criba cincuenta, que cocinarán en el programa un plato de pollo. Quedarán treinta y tras una segunda prueba, los quince definitivos.

Sin ser profesionales, se mueven bien en la cocina y lo que les falta por aprender se lo van a enseñar Juan Mari Arzak, Quique Dacosta, los hermanos Roca, Pedro Subijana, Martín Berasategui... y otros cocineros de primera fila que suman 75 estrellas Michelin entre todos. «Traeremos a los mejores chefs del país, estamos haciendo Marca España», se apunta el tanto Pepe Rodríguez, que esta vez se va a poner serio de verdad. «Vamos a ver a los jueces muy exigentes y Pepe expulsará directamente a uno de los concursantes, sin meditarlo siquiera», avanzan desde la productora. La bronca va a parecer mayor aún porque este año más que voces se van a escuchar risas. «Me ha sorprendido el buen rollo que tienen los concursantes y lo graciosos que son», confiesa Eva González, la presentadora. La vena cómica de los participantes la van a explotar en los vídeos que ellos mismos van a grabar en la casa donde están alojados.

Sin televisión en el hotel

Más bien encerrados, porque no tienen televisión, ni internet, ni teléfono. Solo un aula de cocina donde poner en práctica lo aprendido con los profesores del Basque Culinary Center, centro que se encarga de su formación. También saldrán fuera, a festejar la capitalidad gastronómica de Cáceres y a visitar Tenerife y coronar el Teide (3.718 metros). «Cuando salen fuera les quitamos la televisión de la habitación del hotel», cuenta un encargado de la producción.

El ganador de esta tercera edición se llevará un trofeo, 100.000 euros, publicará un libro de cocina y podrá hacer un máster en el Basque Culinary Center. El segundo ganará un máster en Pastelería y el tercero un curso de dos meses.

MasterChef regresa a la parrilla de TVE con el aval que la audiencia le ha dado en las anteriores ediciones. El año pasado el concurso de La 1 mantuvo una media de 3,2 millones de espectadores -cinco en la final- y un 18,5% de cuota de pantalla. El 83% de la población ha visto en algún momento MasterChef, un programa que se ha exportado a cincuenta países.

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