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¿Aburridos de escuchar siempre los mismos villancicos?

¿Aburridos de escuchar siempre los mismos villancicos?

Todos los años se incorporan nuevas posibilidades al repertorio navideño. Exploramos seis canciones recién editadas, que van de lo tradicional a lo rematadamente friki

Carlos Benito

Domingo, 25 de diciembre 2016, 10:25

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La Navidad es tiempo de repetición. O, formulado de otra manera quizá más bonita, es una fiesta hecha de rituales, basada en el cumplimiento estricto de unas tradiciones reconfortantes: año tras año adornamos la casa de manera similar, nos empachamos con los mismos alimentos, incluso decimos las mismas tonterías a los mismos cuñados. Y por supuesto, escuchamos (e incluso cantamos) las mismas canciones, porque desde cualquier megafonía nos asedia un tozudo y dulzón enjambre de villancicos, encabezado por el ineludible 'Feliz Navidad' de José Feliciano en versión de Boney M. No, por favor, no empiecen a cantarlo, o no lograrán sacárselo de la cabeza hasta después de Reyes.

Y, sin embargo, todos los años se incorporan nuevas posibilidades al repertorio de las canciones navideñas: en el mercado siempre queda sitio para un villancico más o para un álbum entero consagrado a ellos, y hay unos cuantos artistas que han convertido estos lanzamientos festivos en una enternecedora costumbre. He aquí seis novedades recién editadas, que todavía no han perdido la magia de lo nuevo: tres de estos temas son versiones de clásicos y los otros tres, nuevas creaciones, y los hemos ordenado partiendo de lo más ortodoxo para acabar, en fin, en lo más friki. A ver quién es el guapo que ambienta sus cenas familiares con los dos últimos de la lista.

She & Him. Winter Wonderland

El dúo formado por M. Ward y Zooey Deschanel está entre esos artistas de corazón sensible que suelen sucumbir a la tentación navideña. Hace cinco años ya lanzaron un álbum entero consagrado a los villancicos, en el que demostraron lo bien que se adapta al género su frescura tan americana y tan retro, y ahora acaban de repetir la operación con 'Christmas Party', en el que revisan un repertorio que va desde el 'All I Want For Christmas Is You' de Mariah Carey hasta este machacadísimo 'Winter Wonderland', grabado por cientos de intérpretes desde que se compuso en los años 30. El vídeo, protagonizado por los 'pugs' Roxy, Blue, Bono y Diego, es una infalible arma viral: no conviene dejarlo al alcance de los niños.

Low. Some Hearts (At Christmas Time)

El grupo de Minnesota está ligado de manera inevitable a dos tópicos. El primero es la lentitud: en sus comienzos se solía describir lo suyo como 'slowcore', ya que apostaron por explorar las posibilidades expresivas de los ritmos menos acelerados, sin el alivio fácil de la velocidad. El segundo es la condición de mormones de Alan Sparhawk y Mimi Parker, el matrimonio que forma Low en compañía de un bajista que ha ido variando con el tiempo. En cierto modo, su evidente amor por las canciones navideñas suma ambos rasgos con resultados admirables: en 1999 editaron un elogiadísimo miniálbum de villancicos, en 2008 volvieron a atacar con un single y este año ha llegado el turno de la preciosa 'Some Hearts (At Christmas Time)', una balada (cómo no) cantada por Mimi que ha servido de aperitivo para una gira británica centrada en el material navideño.

Joe Bonamassa. Bring Back My Cadillac

Bonamassa es otro reincidente en estos menesteres festivos, empeñado en mantener viva la larga y fecunda tradición del blues de temática navideña, con la peculiaridad de que suele regalar sus canciones navideñas a través de internet. Todos los años reúne un ramillete de grabaciones y lo cuelga en descarga gratuita: el de este año es un minielepé en toda regla, con seis temas entre los que figuran el 'Santa Claus Is Back In Town' que cantó Elvis o este 'Bring Back My Cadillac', en el que Bonamassa dedica la mañana del 25 de diciembre a preguntarse por qué su chica se ha largado. «Te compré un Cadillac por Navidad / y un anillo de diamantes, / intenté dártelo casi todo», se lamenta el pobre, dispuesto a perdonarlo todo si le devuelve el coche.

Terrier. Los peces en el río

Parece lógico que en un recopilatorio navideño promovido por Jägermeister aparezca este villancico, con su insistencia en beber, beber y volver a beber. ¡Qué mal acabarían los peces si todos esos tragos fuesen del licor que tanto entusiasma a los modernos! El caso es que Terrier se incorporan así a una tradición en la que destacan figuras como Manolo Escobar o Los Chunguitos, que también versionaron esta canción, pero obviamente la banda madrileña le da un toque menos tradicional, con un aire obsesivo y casi maniaco. Gracias a 'Merry Jäger Christmas' y sus «underground Christmas carol covers» también podemos disfrutar, por ejemplo, de Los Bengala haciendo 'La marimorena' o de King Cayman envolviendo en electricidad 'El tamborilero'.

Melvins. Carol Of The Bells

Aquí doblamos la esquina y entramos en el peligroso territorio de los villancicos inesperados. Los hirsutos y ruidosos Melvins no son la primera opción que a uno se le viene a la cabeza a la hora de poner música a la Navidad, y seguramente ha sido esa incongruencia esencial la que ha llevado a Amazon a ficharles para su recopilación 'Indie For Holidays'. Los muchachotes han elegido el ya vetusto 'Villancico de las campanas', compuesto hace más de un siglo por el ucraniano Mykola Leontovych, que en sus manos se convierte en un acongojante canto de guerra, más apropiado para destripar personas que para trinchar pavos. «A nosotros nos ha asustado desde niños», asegura el bueno de King Buzzo, líder de la banda.

Neural Story Singing Christmas

Es, sin ninguna duda, el villancico más original del lote, por más que parezca compuesto e interpretado por un niño de tres o cuatro años. Y, en cierto modo, es así: ha sido creado por una inteligencia artificial, un programa informático de la Universidad de Toronto capaz de escribir su propia letra y su propia música a partir de una fotografía. «El mejor regalo del mundo es una bendición. / Siempre he estado ahí por el resto de nuestras vidas. / Hace cien horas y media. / Me alegro de conocerte. / Puedo escuchar la música que viene del hall. / Un cuento de hadas, un árbol de Navidad. / Hay montones y montones de flores», dice la canción. Vale, tal vez resulte un poco inquietante, pero al menos es menos previsible que el «I wanna wish you a merry Christmas» del hilo musical.

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