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iratxe astui
Sábado, 14 de mayo 2016, 00:39
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La Feria del Pescado de Bermeo arribará del 20 al 22 de mayo con más novedades de lo habitual. La cita, que reunirá a una veintena de puestos en el parque de la Lamera, tiene previsto de hecho abrir una gran carpa para mostrar al público el pasado, presente y futuro del pescado y el mar, a través de la puesta en marcha de diferentes actividades y talleres. El espacio, al que han bautizado con las siglas LOG (Lehena-Oraina-Geroa), ofrecerá al público, entre otros atractivos, una cata y demostración de la preparación de sashimi de atún, de la mano del sushiman proveniente de Tokio, Rui Maehara.
Además, en ese mismo espacio también tendrá lugar la presentación de las virtudes de la sal del Valle de Añana, así como del aceite de oliva extra de la variedad autóctona Arróniz de Lanciego, «que resultan muy adecuadas para la preparación del pescado», señalaron los responsables de la agrupación Arrain Azoka Elkartea, encargada de organizar el evento. La carpa LOG también reservará un hueco para que jóvenes emprendedores tengan la oportunidad de promocionar sus ideas ligadas al sector pesquero y náutico. Además, acogerá un taller de aparejos, un show cooking o demostración de cocina con productos del mar y una cata, a través de la cual el instituto AZTI realizará «un repaso por la historia de nuestros pescados», avanzaron.
La Arrain Azoka, que un año más contará con el patrocinio de EL CORREO, dispondrá también de un amplio programa de actividades complementarias durante los tres días, entre los que destacan, los simulacros de venta de pescado en la cofradía vieja, salidas en barco y visitas guiadas al atunero Mater, convertido en barco-museo para divulgar la cultura marinera y el patrimonio marítimo vasco.
Iniciativa solidaria
Asimismo, con el fin de ambientar e impregnar la feria con aromas del mar y del pescado cocinado, la organización de la muestra ha decidido habilitar otra carpa dentro del recinto ferial en la que alrededor de medio centenar de voluntarios pertenecientes a una decena de asociaciones locales harán turnos para ofrecer al público atún a la brasa. La propuesta se llevará a cabo con fines solidarios y servirá para recaudar fondos, «que destinaremos a sufragar un proyecto de estimulación para menores de entre 6 y 12 años que presenten trastornos en su desarrollo», apuntaron.
La carpa-restaurante de la feria también contará con novedades este año, «ya que allí instalaremos cuatro puestos que ofrecerán diferentes tipos de comida como ahumados, pastelería en conservas de pescado y marisco».
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