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Domingo, 20 de agosto 2017
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Si hay un día para los niños en Aste Nagusia, ese es el tradicional desfile de la Ballena. En pocas fiestas se verá algo así de original, una suerte de fondo de mar muy nuestro. La Ballena, el Pulpo, el Txangurro y el Besugo hicieron este domingo de cicerones para los más pequeños en Bilbao y la ciudad quedó media tarde eclipsada por la magia que transmiten estos seres fantásticos que tanto gustan a los más pequeños.
Además tuvimos una jornada soleada y de temperatura perfecta, como pocas suele haber en la Semana Grande de Bilbao. Y mañana, más. Más calor. A las seis de la tarde partió la particular comitiva marina, que recorrió la Gran Vía de Bilbao en un bullanguero desfile. Por la mañana, de forma previa, los arponeros y el atalayero realizaron un recorrido por el recinto festivo infantil de Aste Nagusia en busca de la ballena, un aperitivo para el macroespectáculo de la tarde.
Porque las dimensiones son tremendas: la ballena, que arroja agua sobre los pequeños, es un hinchable de 12 metros de largo y 5 de diámetro; el Pulpo mide 6 metros de alto y 13 de diámetro y ha expulsado confeti por sus tentáculos; el Txangurro se alarga 10 metros por 8 de ancho y ha fabricado burbujas, mientras que el Besugo, 5 metros de largo y 2 de alto, ha lanzado humo por la boca y arroz por las agallas.
El desfile estuvo encabezado por la batucada de Trokobloco, a la que siguieron los camiones convertidos en barco, que transportaron 15.000 bolsas con confeti, serpentinas, globos y caretas que distribuyeron entre la chavalería. Todos ellos desfilaron al son de la fanfarria Sama-Siku, los Gigantes de Santurtzi y las compañías 'Cal y Canto', 'Xarop de Canya' y 'Planet Vapeur'.
Tras el paso de la cabalgata, un equipo de limpieza del Ayuntamiento de Bilbao fue retirando todo rastro, como el sábado en el txupinazo. También igual que en aquella tarde, el desfile de la Ballena estuvo rodeado de un importante despliegue policial. Agentes de la Ertzaintza se apostaron en las inmediaciones de la Gran Vía y furgonetas y vehículos de la Ertzaintza y la Policía Municipal cortaron los accesos para garantizar la seguridad.
Para facilitar el desfile, desde las cinco de la tarde, se produjeron cortes de circulación progresivos en el entorno de la Gran Vía y calles transversales, desde la Plaza Circular hasta la Plaza Sagrado Corazón. Sobre las nueve menos cuarto de la noche se recuperó la normalidad en el tránsito viario.
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