La sierra de Ubal domina el estrecho valle de Lanestosa, en el confín de Bizkaia con Cantabria. Cruza la carretera general entre Laredo y La Meseta y el río Calera, afluente del Asón. La ladera coronada por los picos Mortera y La Casia protege el flanco de Soba (Oeste). La Peña del Moro, vertical, vigila el límite con Ramales y Carranza.El Moro es una cima caliza de recorrido complicado, con un acceso cómodo por el alto de Ubal. Por Lanestosa ofrece su mejor cara. Una subida completa. Larga y montañera, con paso por las minas de calamina y galena y recorrido de una complicada garma cimera.

Salida desde la bolera de Lanestosa centro. Cruzamos el puente sobre el río y, unos metros más arriba, aparece un cartel. Indica dirección a la Senda de los Rellanos y el Centro del Arte Paleolítico de Kobenkoba. Nos introduce en un sendero enlosado que sufre pegado a una tapia. Robles, pinos y eucaliptos sombrean el recorrido. Un tramo más pendiente y alcanzamos al rellano de la Cueva de los Judíos (0h.12). Es una bocamina de nombre de origen incierto.Unos escalones llevan al mirador de Kobenkoba (0h.15). Allí se encuentra el Centro del Arte Paleolítico Europeo (visitas concertadas previa reserva: 696 446 301 / 675 716 161). Desde la plataforma de madera hay una buena vista de Lanestosa. Ya por terreno abierto, una pista de grava lleva a un primer cruce (letrero). Vamos hacia arriba, a las minas (0h.22). Una explanada con bocaminas y escombreras removidas. Un letrero señala direcciones a las minas (derecha) y a la Senda de los Rellanos (izquierda), que es la nuestra. Pateamos una senda que pierde altura hasta un hito (0h.35). Desvío (arriba, marca naranja) por un sendero que sube por un hayedo despejado. Un primer repecho nos cambia de vertiente. Aparecen las encinas. Otro tirón y desembocamos en una ladera herbosa, muy pendiente, con los cantiles del Moro encima.Hitos y puntos rojos sobre la roca llevan hasta la senda protegida por una barandilla que recorre la pared (1h.05). Un pasillo vertinigoso, sin peligro, que termina en una canal. Unos escalones ayudan a superar el embudo. Rellano de la mina Chomin (1h.15). Escombreras y pozos mineros.Caminamos hasta cruzar con la pista de Lanestosa. Subimos por ella hasta encontrar un camino (izquierda). Es el nuestro. Pasa junto a la estación (vallada) de la Red Sísmica del Ministerio de Fomento y sigue hacia la doble Peña del Moro, arriba, a la izquierda. Es un viejo camino minero tallado en la garma, desnuda, muy quebrada y peligrosa. No debemos abandonarlo. Va de manera lógica hasta la base (1h.55). Letrero. Desde allí, un sendero sube por la escombrera cubierta de hierba (bocaminas) hasta el collado (2h.07). La cima principal del Moro queda a la izquierda. Se alcanza por la arista (2h.15). La divisoria entre Euskadi y Cantabria cruza por el alto, ocupado por un vértice y un buzón del Club Monseñor Igetto. Las vistas son espectaculares: el Alto Asón, Rubrillo, Santoña y Limpias, Lunada y los montes de Bizkaia...Vuelta al collado y trepada, más sencilla que la anterior, a la segunda altura de El Moro (2h.25). Tuvo buzón. Se encara al Pico del Mazo, al otro lado del barranco de Las Minas.No nos complicamos la vida. Descendemos hasta el cruce con la pista de Lanestosa (3h.10) y continuamos la bajada por terreno herboso y venteado hasta un cruce (3h.40). No hay indicador. Por la derecha lleva a una mina hundida (colmenas). Siguen Los Rellanos (4h.00) y descenso a Lanestosa (4h.15).