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Imagen exterior del Palacio de Justicia de Vitoria. Igor Aizpuru
Cuatro años de cárcel para el hombre que abusó dos veces de la hija menor de su novia en Álava

Cuatro años de cárcel para el hombre que abusó dos veces de la hija menor de su novia en Álava

La declaración grabada de la niña, de sólo 5 años, clave para que la Audiencia condene al procesado y absuelva a la madre de «omisión»

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Jueves, 19 de abril 2018, 01:44

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El testimonio grabado de la víctima -una niña de sólo 5 años en el momento de los hechos, y cuyas palabras fueron seguidas con consternación en la sala- ha resultado clave en la condena al exnovio de su madre por dos episodios de abusos sexuales.

La Audiencia Provincial de Álava, según la sentencia a la que ha tenido acceso este periódico, acaba de condenarle a cuatro años y un día de prisión. También le ha impuesto una orden de alejamiento de la pequeña por un plazo de ocho años. Por último, el ya sentenciado deberá abonar 1.500 euros en concepto de daños morales.

La madre, también procesada al entender la Fiscalía que no hizo nada en un primer instante, aunque sí denunciaría después, ha sido absuelta de la acusación de autora «por omisión». Contra este fallo cabe recurso al Tribunal Supremo.

Pese a que por la sala auxiliar de la Audiencia desfilaron hasta ocho adultos -los dos encausados, un par de educadores, un psicólogo, un ertzaina y dos hermanas de la víctima-, fue la declaración grabada de la menor lo que desniveló la balanza. En la secuencia, de algo más de cinco minutos, la pequeña narró el tormento sufrido a manos del que fuera compañero sentimental de su madre, que tardó «varios días» en denunciar a causa del «shock».

«Una mentira»

Como suele ser habitual en este tipo de juicios, la declaración de la víctima ha resultado vital en la sentencia. Porque el principal procesado negó los abusos relatados por la Fiscalía. «Estamos aquí por una mentira», se escudó firme. «Sólo estaba con ella para llevarla al colegio o en el bar donde trabajaba para su madre».

Los abusos se produjeron en la primavera de 2015 en la casa donde residían los encausados y la familia de ella. En mayo, este hombre se mudó a otro domicilio «porque terminó nuestra relación». La progenitora, en cambio, explicó que le echó al contarle su hija los abusos.

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