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Una fila de coches avanza por la avenida de San Prudencio, en Armentia.
El radar de Armentia se estrena con 114 multas en tres semanas

El radar de Armentia se estrena con 114 multas en tres semanas

La Policía Local detectó las infracciones con un vehículo camuflado en el Paseo del Peregrino

Salvador Arroyo

Miércoles, 28 de junio 2017, 00:22

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Un centenar de conductores, el 6% de los que se pusieron a tiro del radar móvil de Armentia, se han convertido en los primeros infractores que serán sancionados por rebasar la velocidad máxima de 30 kilómetros por hora en esa zona residencial y de tráfico calmado de la red vitoriana. En menos de un mes de funcionamiento, el vehículo camuflado de la Policía Local cazó a 114 vehículos del total de 1.773 controlados en tránsito a la altura del Paseo del Peregrino, según informó ayer el Ayuntamiento.

Toda la Avenida de San Prudencio -en cuyo eje se encuentra el punto de vigilancia elegido- es utilizada como atajo hacia Salburua, Júndiz y el centro de la ciudad. Recurso para miles de conductores que quieren evitar los semáforos y radares fijos de Alto de Armentia y Portal de Castilla, concentra una alta densidad de tráfico. Una auténtica autopista en plena zona residencial, con gran afluencia de peatones. Hasta 87.180 coches llegaron a computarse durante la primera semana de mayo; periodo cogido al azar por Seguridad Ciudadana, que llevó a la redacción de un informe municipal en el que se aconsejaban medidas de control de velocidad. El motivo, apenas el 0,07% de los turismos, motocicletas e incluso vehículos de transporte colectivo -prácticamente nadie, en definitiva- se ajustaron al tope de 30 kilómetros por hora.

Y los primeros datos oficiales parecen confirmar que el radar (con un panel informativo que advierte de su presencia) ha tenido un efecto disuasorio. Se pisa menos el acelerador. Primero por el porcentaje de infractores y segundo por los máximos que han merecido sanción administrativa. Responden a velocidades de tránsito que se mueven en la horquilla de los 56 hasta los 79 kilómetros por hora. Durante el periodo de estudio de mayo, por ejemplo, más de trescientos conductores llegaron a lanzarse por encima de los 90 -lo que hubiera motivado multas directas por un delito contra la seguridad vial-.

En un primer momento, los controles de velocidad se iban a realizar en la avenida de San Prudencio, pero finalmente el Ayuntamiento decidió realizarlos en el paseo del Peregrino, que forma parte del mismo eje viario de Armentia en el que «se observan también conductas imprudentes» y que tiene la misma restricción de velocidad. El Ayuntamiento advirtió ayer de que, como en el caso de Armentia, colocará el radar móvil en los puntos en los que haya quejas vecinales por exceso de velocidad, accidentes de circulación o áreas con riesgo para vecinos y peatones.

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